Las habitaciones tienen un buen diseño y son lo suficientemente espaciosas. Hay una gran variedad de comodidades en la habitación, como una chimenea y un reproductor de DVD. La ubicación en una zona residencial es perfecta e increíble, a solo 5 minutos a pie del centro de Solvang. La comida del restaurante interior es exquisita.

Quedarse aquí es una experiencia estupenda. Me han gustado mogollón la chimenea de gas y el reproductor de DVD en la habitación. En el hotel se respiraba un ambiente elegante...

habitación muy atractiva y absolutamente impresionante con una vista pintoresca a la calle. ubicación cerca de varios lugares, como todas las tiendas y restaurantes y el teatro. cené tan cerca del hotel, en tower pizza.

Las habitaciones son absolutamente impresionantes y cómodas. Tiene una chimenea y un reproductor de DVD. Una ubicación buena y estupenda cercana al centro de la ciudad, fácil para salir por ahí. Reescritura: Las habitaciones son simplemente magníficas y acogedoras, equipadas con una chimenea y un reproductor de DVD. La ubicación es excelente, cerca del centro de la ciudad y conveniente para explorar. Además, se encuentra lo suficientemente cerca de los restaurantes locales, el casino, tiendas y otros lugares de interés.

Nos encantó este lugar! La ubicación en un barrio residencial fue perfecta para nosotros, alejada del bullicio del centro pero lo suficientemente cerca para disfrutar de todas las atracciones. El servicio de habitaciones fue excelente, siempre atentos a nuestras necesidades. También nos gustó mucho la atención en la recepción, nos dieron la bienvenida con una bebida refrescante y nos ofrecieron información y ayuda para organizar nuestras excursiones. La habitación era fabulosa, con todas las comodidades que necesitábamos, como aire acondicionado, una zona de estar acogedora y un amplio patio con muebles de jardín. También apreciamos los pequeños detalles, como el minibar y los artículos de tocador gratuitos.

Recomendaría este hotel a todos.

Me encantó la decoración dulce y cuidada de este encantador hotel. Se sentía como una casa de muñecas donde no querías tocar nada para no arruinar el ambiente. La amabilidad del personal y el delicioso desayuno con especialidades danesas fueron dos puntos destacados. También está en una ubicación perfecta, ya que a pesar de estar en un lugar tranquilo, todos los atractivos de la pequeña ciudad están a solo dos cuadras.

Los baños se sentían un poco viejos y, aunque estaban limpios, daban la impresión de lo contrario. El hombre de recepción era un poco rudo y serio al principio, pero luego se volvió más amable.